Hoy día vi como gesticulaba un candidato que se cree y creía vencedor en las elecciones municipales de Lima Metropolitana. Este candidato, que está siendo acusado de corrupción y de lavado de activos, y que ha sido tachado por falsedad en su hoja de vida es aquel que la derecha más recalcitrante defiende a morir. Después de aparecer en forma anónima por varios lugares sin declarar a la prensa, ahora esa estrategia se ha ido al agua y cuando las encuestas están que hierven con sobresaltos en las que indican su tremenda caída en estos últimos 15 días ha salido a maldecir y a denunciar boicot y más sandeces. Lima es una plaza fundamental para la derecha. Lo saben desde el boquiabierto Alan hasta la sorprendida Keiko, que no acierta una. Y esta plaza en el terreno electoral es clave para la gran faena del 2016. La derecha puede perder Puno, Apurímac, Cajamarca u Moquegua, como dice el bobalicón Aldo Mariátegui en su columna del Comercio ayer. Pueden perder estas plazas, como parece ser por las encuestas e intención de voto en estos lugares, pero no pueden ni deben perder Lima. Y van a ir hasta Costa Rica, si es posible, para impedir tremenda “injusticia”. Pero eso valdría tolerar que se maneje la legalidad electoral como se les da la gana y donde cualquiera puede no solo mentir, sino robar, engañar, etc.

Una nueva situación se apertura en el campo electoral con este traspiés del candidato del Apra. Porque insistimos, el candidato del Apra es Castañeda y no el bigotes. La derecha económica pasa esto con mondadientes de acero. No quiere a Alan para el 2016. Por lo tanto hay que golpear a Castañeda. No hay que darle larga a que se crea el único candidato. Es probable que hasta a la señora Villaran miren como una opción. Tanto se ha corrido a la derecha que puede aparecer apetecible para una derecha avida de figuras y figurines. En la política también hay “comodines” como en los naipes. No es el Rey el que siempre sirve en la mano. Eso no está en la lista de estrategias del comando del mudo. Si se aprovecha este momento puede que la otra opción avance a desplazarse un pocio mas a la derecha o al centro y “jale” este electorado que, repetimos, busca una opción no corrupta e implicada en mentiras y negocios turbios.

Vamos aun podemos decir que los sectores democráticos pueden tener éxito en algunos lugares importantes como Apurimac, Cusco, Moquegua, Bagua, y Cajamarca. Si a ello se agrega Lima podría configurarse un nuevo escenario electoral y traer a la candidata Villaran a un centro pero mas cercano a la izquierda que el centro liberal.